Hay emociones que no se pueden explicar... pero sí narrar.
Aún y cuando el mundo parece girar como en unos de estos juegos mecánicos qe te hacen sentir como si te metieran en una licuadora: agitado, molido, revuelto, destrozado, etcétera; aún en medio de la recesión económica y la guerra en el mundo; incluso más allá del $%&" COVID 19; a pesar de todo eso, siempre hay cosas, momentos que pueden llenarnos de felicidad, o al menos, aliviar la carga pesada de nuestro día a día:
Un saludo a la mitad de la calle; un mensaje de una persona en la que has estado pensando; recibir una buena noticia; pensar en lo que vas a hacer hoy que saliste más temprano de trabajar; preparar tu partido de futbol del fin de semana; encontrar un billete en la chamarra que tenía meses que no te ponías; caminar de la mano con tu pareja; tomar una cerveza con un amigo al final de la jornada; alcanzar despiertos a tus hijos o hijas o ambos; recibir lengüetazos de felicidad de tu perro; que tu gato se te acerce con la colita parada; encontrar un pájaro en la calle y ayudarlo a levantarse; voltear al cielo y mirar al sol ponerse; o ver pasar una estrella fugaz...
Un flash back de un momento de la infancia; escuchar por ahí tu canción preferida; una llamada de tu abuela; recordar de repente algo que habías olvidado; encontrar un lugar para sentarse en el vagón del metro; recibir noticias de tu mejor amigo; un café por la mañana; un colibrí en tu ventana; una foto muy especial apreciendo sin razón en tu teléfono; tener una epifanía; saber que ya vas a llegar a donde te diriges; leer un fragmento del libro que te acompaña; recibir una buena calificación en la escuela; escribir la útima línea de tu ensayo; escuchar en vivo o por teléfono un te amo...
Decidir rescatar un gatito que te encontraste en la calle; ser rescatado por un gatito que te encontraste en la calle; que alguien te invite a ver una película; escuchar una frase de agradecimiento; encontarte en la tiendita tu dulce favorito...
Hoy fue un día pesado; pero me dio tiempo de disfutar dos cosas de estas que no esperas:
- Dos videos de como una mujer mexicana, atleta, ganó la semifinal, primero, en el último segundo y la final después, del torneo Mundial de Tae Kwon Do; casi lloro de la emoción en la semi y se me enchinó la piel de ver el triunfo y su festejo: y,
- En el cajón de mi oficina, al sacar la bolsa con dulces para rellenar el contenedor que tengo para las visitas, me encontré ¡un bubulubu..!
Días así son redondos -sobre todo si tomas en cuenta que en este momento sigo en la oficina-, ya si te ganas el premio gordo de la lotería es vanidad...
¿A ustedes que los mueve?
---Alexred---
Yo creo que el bubulubu tenía algún psicotropico, jaja .
ResponderEliminarA mi me falta que me mueva un saludo de mi adorado Alex!!! ☺️ Abrazos hasta jarochilandia